Ir al contenido principal

El fascismo está actuando en Santa Cruz, el gobierno debe investigar

Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás...

¿Trump o Hillary?

Por: Atilio Boron
Estos días, después de la nominación de Donald Trump como candidato por el partido republicano, varios medios me preguntaron quién sería más conveniente para América Latina, si él o Hillary Clinton. Mi respuesta: ninguno de los dos, porque lo que importan no son tanto las personas como la alianza social a quien ellos representan. Y esta alianza es la “burguesía imperial” o el “complejo militar-industrial-financiero”, al cual ambos responden si bien con características idiosincráticas propias. Por eso creo que la pregunta está mal formulada.
Ningún presidente de Estados Unidos se ha apartado, desde George Washington hasta aquí, de las premisas fundantes que guían las relaciones hemisféricas y que condenan a nuestros países a la condición de inertes satélites del centro imperial: (a) mantener América Latina y el Caribe como el “patio trasero” de Estados Unidos que no admite la intromisión de terceras potencias (Doctrina Monroe, 1823); (b) fomentar la desunión y la discordia entre los países del área y oponerse con total intransigencia ante cualquier proceso de integración o unificación. Por eso, Washington sabotea a la UNASUR, a la CELAC, mismo al MERCOSUR, ni hablemos del ALBA-TCP, Petrocaribe, Banco del Sur o Telesur. Esta política arranca desde los tiempos del Congreso Anfictiónico de Panamá en 1826 y continúa hasta hoy. (c) el tristemente célebre “corolario de (Theodore) Roosevelt”, de 1904, en el que Estados Unidos se arroga el derecho a intervenir en los países del área sus gobiernos sean “incapaces de mantener el orden dentro de sus fronteras y se comporten con una justa consideración hacia sus obligaciones con el extranjero.” Y más adelante prosigue diciendo que: “siempre es posible que las acciones ofensivas hacia esta nación (Estados Unidos) o hacia los ciudadanos de esta nación (eufemismo por empresas norteamericanas) de algunos Estados incapaces de mantener el orden entre su gente, incapaces de asegurar la justicia hacia los extranjeros que la tratan bien, pudieran llevarnos a adoptar acciones para proteger nuestros derechos; pero tales acciones no se adoptarían con miras a una agresión territorial y serían adoptadas sólo con una extrema aversión y cuando se haya hecho evidente que cualquier otro recurso ha sido agotado.”

Fieles a estas premisas no tiene sentido alguno preguntarse si Trump ni Clinton serían más convenientes para América Latina. Quizás podríamos especular sobre quien sería menos malo. En tal caso creo que entre estas dos malas personas, inmorales y corruptas, tal vez la menos dañina podría ser Hillary, pero nada más que eso. Ella y Trump representan, con ligeros matices, lo mismo: la dictadura "legal" del gran capital en Estados Unidos. Trump es más impredecible y esto no necesariamente sería malo. Hasta podría despegarse ocasionalmente del “complejo militar-industrial-financiero”,  pero su compañero de fórmula –un cristiano evangélico de ultraderecha- es un troglodita impresentable. Hillary es muy predecible, pero su record como Secretaria de Estado en la administración Obama es terrible. Recuérdese, entre muchas otras cosas, la carcajada con que recibió la noticia del linchamiento de Muammar El Gadaffi, gesto moralmente inmundo si los hay. Como senadora se consagró como una descarada lobbista de Wall Street, del complejo militar-industrial y del Estado de Israel. América Latina no puede esperar nada bueno de ningún gobierno de Estados Unidos, como lo ha demostrado la historia a lo largo de más de dos siglos. Puede, ocasionalmente, aparecer algún presidente que marginalmente pueda producir situaciones puntualmente favorables para nuestros países, como ha sido el caso de James Carter y su política de Derechos Humanos, concebida para hostigar a la Unión Soviética e Irán pero que, indirectamente, sirvió para debilitar las dictaduras genocidas de los años setentas. Pero nada más que eso. Nosotros tenemos que forjar la unidad de nuestros pueblos, como lo querían Artigas, Bolívar y San Martín en los albores de las luchas por nuestra independencia. No tenemos nada bueno que esperar de los ocupantes de la Casa Blanca cualquiera sea el color de su piel o su procedencia partidaria.

Síguenos en Facebook:  Escuela Nacional de Formacion Politica 
Twitter: @escuelanfp


Rellene el siguiente formulario para suscribirse.


En Bolivia:









Comentarios

Entradas populares de este blog

Pedro Ignacio Muiba, el héroe

Por: Homero Carvalho Oliva En 1975, mi padre, Antonio Carvalho Urey, terminó una investigación iniciada en la década de los sesenta que habría de cambiar la historia nacional. Después de muchas visitas al Archivo Nacional de Bolivia, dirigido en ese entonces por Gunnar Mendoza, extraordinario intelectual e historiador, quien le ayudó a ubicar los folios que habrían de probar toda una hazaña que da testimonio que los indígenas moxeños participaron activamente en la Guerra de la Independencia de nuestro país, al mando del cacique Pedro Ignacio Muiba. Esta investigación se publicó, primero en septiembre de 1975, en un policopiado financiado por la Universidad Técnica del Beni, en un pequeño tiraje de 200 ejemplares y luego en la famosa Biblioteca del Sesquicentenario de Bolivia. Dos años más tarde, en 1977, Antonio publicó el libro titulándolo Pedro Ignacio Muiba, el Héroe y de esa manera se reparó una injusticia histórica. En sus investigaciones, Antonio se basó, entre otros, en...

La despatriarcalización

Por: Julieta Paredes Al igual que el Seguro Universal de Salud (SUS), la despatriarcalización, como nombre para una política pública, tardó mucho, pero llegó. Entonces, en este marzo de luchas de las obreras, es necesario analizar, ¿qué es lo que realmente llegó? Fruto de una serie de movilizaciones de mujeres pertenecientes a las organizaciones sociales del proceso de cambio, se lograron algunas medidas en el Ejecutivo. Fueron movilizaciones que se realizaron a lo largo del año pasado, con encuentros departamentales. Así fue que se logró concretar un listado de demandas que más o menos se repitieron a lo largo de estos años, con algunas interesantes novedades. Entre ellas podemos señalar la exigencia del salario al trabajo doméstico y la necesidad de un espacio en el Gobierno para este sector. Algo así como un Ministerio de las Mujeres, instancia que tenga la jerarquía necesaria para efectuar las tareas que corresponden a la mitad de la población de Bolivia que somos las mu...

Idiosincrasia e ideología

Por: Félix Tarqui Triguero No son posibles las revoluciones económicas sin las revoluciones culturales porque todos aquellos contenidos que constituyen el fundamento de determinada cosmovisión propia de cada nacionalidad o sociedad pueden ayudar o frenar su avance por ser una manera de pensar de cada agrupación humana, en funcion a su historia y cultura. Así nace la idiosincrasia propia de cada pueblo, sin embargo, se enfrenta a la idiosincrasia forzada o alienante que influye día a día a las grandes masas de la población mundial de manera globalizante, en ese contexto necesitamos ver que Bolivia es un país de molde capitalista y sub desarrollado (empobrecido por la clase dominante que gobernó desde 1825 exceptuando a Antonio José de Sucre, Andrés de Santa C. hasta el 2005), La ideología como el estudio de las ideas es también un proceso de construcción critica, influenciado tan pronto el individuo se encuentra inmerso en las realidades sociales, económicas, culturales...