Ir al contenido principal

El fascismo está actuando en Santa Cruz, el gobierno debe investigar

Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás

Silvia Federici: “La violencia es una constante en la vida de la mujer bajo el capitalismo”

Por: Beatriz Asuar Gallego
La escritora y activista italiana está de gira en España en un ciclo de conferencias sobre la violencia contra las mujeres, invitando a una reflexión sobre los diferentes tipos de opresiones y sus orígenes: el patriarcado y el capital.
Silvia Federici es un gran referente del movimiento feminista internacional. Demostrado ha quedado este lunes tras el rotundo éxito de la conferencia Capitalismo y violencia contra las mujeres en Madrid. El evento, organizado por Traficante de Sueños, ha tratado las opresiones hacia las mujeres en el sistema actual: el trabajo productivo y reproductivo desde una perspectiva de género y las diferentes formas de violencia pública y doméstica.
La nave de Terneras del Matadero, donde tuvo lugar la charla este pasado Lunes 4 Septiembre en Madrid, estaba a rebosar. Y fuera, centenares de personas se quedaron a las puertas al no tener un sitio dentro de la sala. No se fueron, escucharon a través de unos altavoces a la escritora de Revolución punto cero y Calibán y la bruja. Mujeres, cuerpo y acumulación originaria.
Que tantas personas hagan cola para participar en una reflexión sobre feminismo y anticapitalismo dice mucho del momento actual, señalan las organizadoras del evento. “Hay que comprender de dónde viene la violencia, cuáles son sus raíces y cuáles son los procesos sociales, políticos y económicos que la mantienen para comprender que cambio social es necesario”, comienza explicando en la conferencia la autora italiana. La activista lo tiene claro: la raíz está en la estructura y en el sistema. La violencia contra las mujeres no es individual; es del estado, es policial, es represiva, es de la militarización de la vida, pero, sobre todo, es del patriarcado y del capital
El trabajo productivo es el que produce materiales y herramientas, es retribuido con un salario y es el que históricamente han realizado los hombres. El trabajo reproductivo es el asignado a las mujeres y es el encargado de mantener la vida: alimenta, cuida, educa, pero no es retribuido con ningún salario. Las mujeres siempre se han encargado de él, pero como señala la escritora, ya no hacen solo este trabajo, muchas trabajan fuera de casa sin que se haya producido un cambio social por lo que no hay conciliación entre producción y reproducción.
Esto forma un nuevo desarrollo del patriarcado porque se produce una situación de doble explotación de las mujeres. En este sentido, la autora habla sobre los orígenes del capitalismo para explicar esta organización: es el “proceso de acumulación primitiva”, por el cual el capitalismo se desarrolla para controlar todas las fuerzas de trabajo.
El trabajo reproductivo y el cuerpo de las mujeres en sí mismo es la primera fuente de riqueza porque reproducen el resto de fuerzas de trabajo. Sin él, no hay otras formas de producción, y por esto existen estas formas de opresión sobre las mujeres porque “el ataque a las mujeres es un ataque a la cohesión de la comunidad y a la reproducción social”.
Esta situación se manifiesta en violencias a las que se tienen que enfrentar las mujeres de todo el mundo, explica Federici. Son violencias relacionadas con el género, pero también “con la precariedad de la vida, la incertidumbre laboral, la violencia institucional y policial o la represión”. Hay violencia económica y no económica, y violencia doméstica y violencia publica, todos los tipos están conectados.
Por esto, agrega la autora que cuando se dice que se va a poner fin a la violencia contra las mujeres, se dice que “se va a poner fin a todo el sistema: no solo a los asesinatos o violaciones, también a las guerras, a las expulsiones, al desempleo, a los recortes… Y para enfrentarnos tenemos que articularnos a todos los niveles. Organizarnos y ver cómo vamos a luchar por la sanidad, la educación, el desempleo… Necesitamos un programa de creación de una nueva sociedad”.
“Si las mujeres paran, el mundo para”
“El fin de la violencia contra las mujeres debe llegar desde abajo y desde las propias mujeres. No podemos esperar a las instituciones y al Estado porque éste mismo es el máximo responsable de la violencia”. Con estas palabras, Federici hace un llamamiento a la importancia de la organización social del feminismo.
Cuando termina la explicación de la escritora, comienza un turno de debate en el que diferentes movimientos sociales explican sus espacios de lucha feminista y sus formas de organización en el que han salido múltiples ejes de poder, entre ellos, las opresiones a las migrantes, la precariedad de las trabajadoras del hogar o la invisibilizacion de las mujeres en la cultura e historia.
Resalta la organización del 8 de marzo que explica que llevan desde el pasado día de la mujer trabajadora reflexionando y organizando un 8 de marzo en el que se pare el país entero: “Queremos hacer una huelga social: Yo no soy conductora de autobús pero sí pasajera y las pasajeras también podemos parar el autobús” explican desde la organización.
La escritora añade: “El trabajo reproductivo es el principio de todo lo demás y si las mujeres paran, todo para”. Federici también ha incidido en la importancia de los hombres en la lucha feminista cuando ha salido el debate sobre el papel de hombres y mujeres en este proceso.

Ha señalado que “la violencia contra las mujeres es un problema, sobre todo, de los hombres, y por ello los hombres tienen que responsabilizarse, movilizarse. Si no se movilizan perpetúan la violencia contra las mujeres y la infancia”.
Síguenos en Facebook:  Escuela Nacional de Formacion Politica 
Twitter: @escuelanfp


Rellene el siguiente formulario para suscribirse.


En Bolivia:









Comentarios

Entradas populares de este blog

La despatriarcalización

Por: Julieta Paredes Al igual que el Seguro Universal de Salud (SUS), la despatriarcalización, como nombre para una política pública, tardó mucho, pero llegó. Entonces, en este marzo de luchas de las obreras, es necesario analizar, ¿qué es lo que realmente llegó? Fruto de una serie de movilizaciones de mujeres pertenecientes a las organizaciones sociales del proceso de cambio, se lograron algunas medidas en el Ejecutivo. Fueron movilizaciones que se realizaron a lo largo del año pasado, con encuentros departamentales. Así fue que se logró concretar un listado de demandas que más o menos se repitieron a lo largo de estos años, con algunas interesantes novedades. Entre ellas podemos señalar la exigencia del salario al trabajo doméstico y la necesidad de un espacio en el Gobierno para este sector. Algo así como un Ministerio de las Mujeres, instancia que tenga la jerarquía necesaria para efectuar las tareas que corresponden a la mitad de la población de Bolivia que somos las mu

Idiosincrasia e ideología

Por: Félix Tarqui Triguero No son posibles las revoluciones económicas sin las revoluciones culturales porque todos aquellos contenidos que constituyen el fundamento de determinada cosmovisión propia de cada nacionalidad o sociedad pueden ayudar o frenar su avance por ser una manera de pensar de cada agrupación humana, en funcion a su historia y cultura. Así nace la idiosincrasia propia de cada pueblo, sin embargo, se enfrenta a la idiosincrasia forzada o alienante que influye día a día a las grandes masas de la población mundial de manera globalizante, en ese contexto necesitamos ver que Bolivia es un país de molde capitalista y sub desarrollado (empobrecido por la clase dominante que gobernó desde 1825 exceptuando a Antonio José de Sucre, Andrés de Santa C. hasta el 2005), La ideología como el estudio de las ideas es también un proceso de construcción critica, influenciado tan pronto el individuo se encuentra inmerso en las realidades sociales, económicas, culturales

Pedro Ignacio Muiba, el héroe

Por: Homero Carvalho Oliva En 1975, mi padre, Antonio Carvalho Urey, terminó una investigación iniciada en la década de los sesenta que habría de cambiar la historia nacional. Después de muchas visitas al Archivo Nacional de Bolivia, dirigido en ese entonces por Gunnar Mendoza, extraordinario intelectual e historiador, quien le ayudó a ubicar los folios que habrían de probar toda una hazaña que da testimonio que los indígenas moxeños participaron activamente en la Guerra de la Independencia de nuestro país, al mando del cacique Pedro Ignacio Muiba. Esta investigación se publicó, primero en septiembre de 1975, en un policopiado financiado por la Universidad Técnica del Beni, en un pequeño tiraje de 200 ejemplares y luego en la famosa Biblioteca del Sesquicentenario de Bolivia. Dos años más tarde, en 1977, Antonio publicó el libro titulándolo Pedro Ignacio Muiba, el Héroe y de esa manera se reparó una injusticia histórica. En sus investigaciones, Antonio se basó, entre otros, en