Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás...
Por: Carla Espósito Guevara
Por
primera vez después de 24 años, el 26 de octubre pasado, Estados Unidos anunció
ante el plenario de la Asamblea General de Naciones Unidas, que se abstendría
de votar contra la resolución que condena el bloqueo a Cuba. Con esto,
reconoció implícitamente el fracaso de su política exterior hacia Cuba y el
aislamiento diplomático de su medida. 191 votos en contra, 0 a favor y 2
abstenciones, -de Estados Unidos e Israel-, fue la votación con la que concluyó
la histórica sesión de Naciones Unidas que rechazó abrumadoramente el embargo
contra Cuba.
El
embargo económico, comercial y financiero contra la Isla es el más prolongado
que se conoce en la historia moderna. Ha sido condenado 23 veces por las
Naciones Unidas y siempre Estados Unidos votó contra esa resolución. Fue
impuesto en octubre de 1960, como respuesta al proceso de nacionalizaciones y
las expropiaciones legítimamente realizadas
por el gobierno revolucionario a
propiedades de las compañías estadounidenses tras el triunfo de la revolución.
Inicialmente, excluía alimentación y medicinas, pero en 1962 Estados Unidos
endureció las medidas y el embargo llegó a ser casi total.
En
1992, adquirió el carácter de ley en los Estados Unidos. Posteriormente en
1996, el Congreso de los Estados Unidos aprobó la Ley llamada Helms-Burton Act
que prohibió a los ciudadanos estadounidenses hacer negocios con el gobierno
Cubano. Aunque la guerra fría había finalizado, en 1999, el presidente Bill
Clinton amplió el embargo prohibiendo a las filiales extranjeras de compañías
estadounidenses comerciar con Cuba, lo que la convirtió en la primera ley
transnacional en el mundo, que ahogó todos los intentos de Cuba por establecer
relaciones comerciales con empresas europeas.
Los
daños económicos financieros y humanos que el bloqueo de Estados Unidos impuso
a Cuba son enormes. Según el último informe del gobierno cubano del 2015, se
calcula que el daño económico asciende a 120 mil 190 millones de dólares. Ha
afectado a todos los sectores de la economía cubana, incluidos aquellos ámbitos
encargados de asegurar los derechos fundamentales como la salud, debido a la
imposibilidad de importar medicamentos y al sector de la alimentación. El
Ministerio de Agricultura cubano calcula que las afectaciones a la agricultura
ascienden a 590 millones de dólares e incluyen desde dificultades para obtener
semillas de hortalizas, hasta la escasez de piensos para la manutención del
ganado.
El
transporte, ha sufrido pérdidas económicas incalculables, debido, entre otros,
a “la prohibición de acceder a los puertos de los EE.UU. y a los armadores
internacionales en cuyos buques navegan tripulantes cubanos”, cuba tampoco
accede a las redes mundiales de telecomunicaciones lo que encarece sus costos
de comunicación, no puede acceder a préstamos y la lista puede seguir y seguir.
Por
todo esto, el bloqueo contra Cuba, quedará como uno de los actos más vergonzoso
en la historia de la humanidad, como un acto flagrante de violación a todos los
acuerdos en derechos humanos y a los principios fundamentales sobre los que se
asientan tanto la Carta de las Naciones Unidas como el derecho internacional.
Violó sistemáticamente principios como el legítimo derecho a la
autodeterminación económica y política de los pueblos, el reconocimiento de la
igualdad entre los Estados y del de no intervención de los Estados en asuntos
internos de otros estados; Sigue siendo un acto de fuerza producto de un
interés de control y dominio imperialista, cuyo fin era mantener una medida
ejemplificadora para cualquier otro Estado que osase auto determinarse y
diseñar su propio destino.
Solo
una verdadera revolución como la cubana, que forjó un pueblo heroico, luchador,
estudioso y formado en los más altos principios humanistas, pudo haber
resistido un bloqueo de semejante envergadura por tantos años sin quebrantarse.
Naciones Unidas decretó oficialmente el fin del bloqueo, por fin la justicia se
impuso, esperemos ahora que Estados Unidos honre con sus hechos esta
resolución. Como mi querida amiga cubana, Mayte Mazzot decía, ¡Cuba Va!.
y Twitter: @escuelanfp
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