Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás...
Por: Galo Amusquivar
T.
Me encontraba en el museo
de la memoria de Auschwitz, una pequeña muestra realizada en la ciudad de
Madrid, que tiene la intención de recorrer las principales ciudades de Europa,
con el objetivo; que los seres humanos tengamos en cuenta que los errores
(horrores) cometidos en el holocausto por los nazis (nacionalistas extremos) no
tienen que volver a ocurrir.
Sin lugar a dudas
desde el inicio hasta el final del recorrido, las muestras museográficas son
impresionantes, que en otra ocasión escribiré sobre todo lo que mis ojos
pudieron visualizar y mis sentidos percibir en aquella noche.
Solo quiero
retransmitir a modo reflexivo, lo que los sobrevivientes comentaron y dijeron
en los videos expositivos que se difundían: “(…) Lo más importante para la
humanidad es que no existan diferencias y respetemos a todos los seres vivos…”
“(…) No importa la religión que profeses, la política que practiques y la
sociedad o clase a la pertenezcas, lo más importante para el ser humano es
brindar amor y ser bueno con los demás….” “(...) Aceptar y tolerar sus
diferencias sin importar el color de piel, la raza, el idioma, etc….” “La paz
solo puede concebirse desde el amor del ser humano con su entorno, respetando
todo lo que tiene…” “(…) Esta clase de hechos y sucesos nunca debieron suscitarse
y jamás debieron haber sucedido, no volvamos a cometer el mismo error, la
humanidad puede cambiar las cosas que nos dañan y nos matan…”.
Probablemente el
holocausto de Auschwitz para nuestra memoria sea algo mucho más fresco que
otros genocidios, posiblemente sea por las más de seis millones de personas que
murieron; o por la política nacionalista extrema del gobierno fascista en la
segunda guerra mundial; o porque a raíz de aquello se llegó a conformar la
Organización de las Naciones Unidas y la Declaración de los Derechos Humanos; o
posiblemente lo recordemos porque los bloques geopolíticos con diferente pensamiento
ideológico (URSS, EEUU y Reino Unido) se unieron en contra de la amenaza que
tenía la humanidad en aquel momento.
Nos olvidemos que el
derecho a la vida es la razón fundamental para que exista armonía y paz en el
planeta. Pero es necesario recordar que muchos años antes de Auschwitz y poco
reconocido por nuestro medio fue el “Holocausto
de Armenia” que se recuerda cada 24 de abril. Pasaron muchos años y la
humanidad se olvidó que el genocidio de Armenios fue el primer holocausto en la
época moderna, pero esta clase de alertas se reiteraron, a pesar de aquello se suscitó
un nuevo holocausto, todas las amenazas y las posibles llamadas de atención que
los propios pueblos realizaron a sus gobernantes y a la comunidad internacional,
pareció ser algo insignificante, porque 20 años después, la maquinaria del
fascismo en Europa desplegaba toda una fuerza de eliminación esta vez no sería
en contra de armenios, sino en contra de judíos.
Entre el año 1915 y
1923, el Imperio Otomano a la cabeza de los Jóvenes Turcos (partido de fracción
nacionalista), dirigidos por el Comité Central de la CUP, creo el
“Comité Ejecutivo de los Tres”, compuesto por el Doctor Nazim, Behaeddin Shakir
y Midhat Sgyukri, estos tres fueron los encargados de restablecer cronogramas
de deportación por provincia, destinos de envió para los armenios, campos de
concentración, formas de eliminación, etc.
Fue exactamente el 24 de abril de 1915,
cuando detuvieron a 250
Intelectuales y líderes de la comunidad de armenia en Constantinopla (actual Estambul)
su destino fueron dos campos de concentración: Chankri y Ayash cerca de Ankara,
comenzó la marcha de la muerta y muchos murieron en el trayecto, luego se tomó
la decisión de deportar a todos los armenios de Anatolia Oriental a los
desiertos de la Mesopotamia en el sur. Los hombres que no podían caminar eran
ejecutados, mujeres violadas, niños y ancianos fueron llevados en caravanas de
la muerte, del total de la población solo el 10% llego a los desiertos donde la
probabilidad de salvación era casi nula.
Las
deportaciones masivas de armenios comenzaron en Zeitún (actual Süleymanli, en
el sur de Turquía) y en Dyortyol así como también en Alejandreta (actual
Iskenderun, en el sur de Turquía) y Adaná, todas regiones del sur de Anatolia
ubicadas lejos del frente de batalla del Cáucaso. Se arrestó a los líderes de
la comunidad de armenia de Sivas, Biltis y Erzurum, los líderes fueron
perseguidos y sus bienes saqueados, enviaron a los
armenios a 26 campos de concentración, los armenios residentes en el imperio
otomano, ascendían a los 2 millones de personas, más del 75% de la población sufrió
las consecuencias de una postura ideológica extrema, a pesar de las muchas
recomendaciones de los agentes de inteligencia de Estados Unidos, Alemania y
Gran Bretaña en la zona, no se tomó ninguna acción por salvar a los mismos, ya
que este hecho se suscitó en medio de la primera guerra mundial, el derecho a
la vida parecía no importarle a las potencias gobernantes en aquella época, al
acabar la primera guerra mundial se manda a juicio a todos los responsables por
el genocidio suscitado, Alemania al ser aliado del imperio Turco, tomo
participación en la declaración de testigos de sus altos mandos, incriminando a
las fracciones radicales del gobierno turco por tal genocidio. En
Armenia Occidental se eliminó a casi el total de la población.
Más
de 20 países (incluyendo a Bolivia) afirman que lo sucedido en Armenia fue
Genocidio, pero a pesar de los esfuerzos por más de 100 años de suscitado el
hecho, para muchos esta parte desastrosa de la humanidad carece de importancia
y de objetividad.
Durante este período,
se produjeron matanzas a la población masculina en su mayoría, deportación
forzada de mujeres, niños, ancianos y enfermos en marchas de la muerte,
obligándolos a transitar el desierto sirio sin agua ni alimentos, campos de
concentración móviles, esclavización y violación de mujeres, robo de identidad
y confiscación de propiedades.
El nacionalismo extremo acabara con la
humanidad, el nacionalismo anti-migración, anti-refugiados, anti-campesinos,
anti-indios, anti-humanidad acabara con nuestras vidas, es sorprendente que en
pleno siglo XXI, aun existan representantes políticos con esta pensamiento ideológico,
que solo desean retornar a épocas de la eliminación sistemática de pueblos para
acabar con nuestra existencia………..Para no volver a cometer el mismo error.
Solidaridad con el Pueblo de Armenia en
su lucha por conseguir que todos los países reconozcan que lo sucedido en
Turquía fue genocidio.
Analista en Derechos
Humanos y Situación Política.
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