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El fascismo está actuando en Santa Cruz, el gobierno debe investigar

Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás

Las Clases Sociales y el Referéndum



Por: M. Javier Astorga M.
En una primera mirada a la actual coyuntura política, pareciera que el próximo referéndum del 21 de febrero estaría enfrentando a las fuerzas de izquierda en contra de  las fuerzas de la derecha, ¿hasta qué punto esto es cierto?, veámoslo de más cerca para aclarar todo vestigio de duda.
Por cuestiones de método y a riesgo de pecar en reduccionismo y encasillamientos nos basaremos en algunas definiciones sobre estos conceptos. ¿Qué se entiende por izquierda y por derecha?  Desde el punto de vista de la teoría de la lucha de clases… “las clases sociales son grandes grupos de hombres que se diferencian entre sí por el lugar que ocupan en un sistema de producción históricamente determinado… las clases sociales son grupos humanos, uno de los cuales puede apropiarse del trabajo del otro por ocupar puestos diferentes en un régimen determinado de economía social” (Lenin). Así mismo el materialismo histórico nos dice que… “la historia de toda sociedad hasta nuestros días, es la historia de la lucha de clases… es la lucha entre clases antagónicas, es la lucha entre esclavos y ciudadanos libres, patricios y plebeyos, siervos y propietarios feudales, proletarios y burgueses (Marx), en síntesis, entre explotados y explotadores. Los explotados necesariamente tendrán que luchar por El Cambio, mientras que los explotadores por la Conservación de su posición dominante.  La izquierda entonces estaría situada por el lado de los explotados y viceversa, la derecha por el lado de los explotadores.
¿Cómo estarían conformadas las  clases Sociales en nuestra realidad? Por el lado de los explotados, estarían los obreros proletarios, otros trabajadores, campesinos, los intelectuales comprometidos con el Cambio Social, las clases medias empobrecidas, estudiantes etc.  (Mao), por”…los indios, campesinos, obreros, intelectuales, estudiantes, mujeres… (Che),  es decir en términos de Fidel, La izquierda es el PUEBLO. Para nuestro caso serían las organizaciones sociales. Entonces ¿qué sería la derecha, cómo estaría conformada? Básicamente  serían los explotadores, los enemigos del Pueblo “…todos aquellos que están confabulados con el imperialismo, los burócratas, la burguesía compradora, los grandes terratenientes, Agroindustriales y el sector reaccionario de la intelectualidad (MAO). La derecha, es decir las clases dominantes en Bolivia y en Tarija son antinacionales y proimperialistas. Cuantitativamente son una minoría pero poderosa económicamente. Así dadas las cosas podríamos colegir en la actual coyuntura política que las fuerzas de la izquierda estarían representadas por el MAS y todas las fuerzas de la Oposición estarían siendo la derecha, cada fuerza con su respectiva opción de cara al Referéndum.
Sin embargo la realidad terca como siempre nos muestra un panorama aún más confuso, claro que sí, porque las abstracciones siempre son más simples que la realidad concreta, siempre es más fácil analizar un modelo de producción en su pureza teórica  que una formación social con sus múltiples determinaciones, es decir que la teoría y la práctica no siempre van de la mano. Y es precisamente en los momentos electorales o de referéndums, que la correlación de fuerzas tanto de izquierda como de derecha se equilibran se funden o se confunden. De la necesidad de captar la mayor cantidad de votos han surgido las alianzas más espurias entre partidos (que son por excelencia la representación de clase), de esta necesidad tan mezquina surgieron las transiciones más vergonzosas entre miembros de una clase social que pasaban como si fueran futbolistas al otro bando.  
Una acertada lectura de esta realidad nos dice, que “… los periodos constitutivos o revolucionarios siempre son violentos, de ahí nacen los Cambios Sociales, es un periodo también de la polarización de las clases sociales, y los periodos de restauración son largos y pacíficos” (Che). Estos periodos se caracterizan por la fusión y transición de las clases sociales.  Por eso el pueblo que es sabio, porque tiene intuición y vivencia de clase y algunos de sus miembros han alcanzado ya la conciencia de clase, sabe bien que estos periodos democráticos son espacios políticos que se los debe aprovechar, no como el logro revolucionario alcanzado sino como el espacio en donde se consolidará el partido revolucionario y por ende el Cambio Social que tanto busca el Pueblo.
No podemos desperdiciarlo cometiendo los errores que se cometieron en etapas políticas anteriores, por ejemplo, el periodo de Torrez y la Asamblea popular de 1970, o el periodo de la recuperación de la democracia con Hernán Siles (1982- 1985) en donde “el infantilismo de izquierda” (Lenin) boicoteó de alguna manera estos procesos que deberían servir para potenciar a las fuerzas de la izquierda revolucionaria, estos son los resultados, de porque ahora la izquierda se encuentra en donde se encuentra. Pero es bueno volver siempre a la teoría de la única ciencia socialmente válida que es la ciencia de la historia, y apoyándonos en los clásicos del pensamiento marxista, podemos decir que el pueblo, es decir la izquierda, debe seguir apoyando y lo seguirá haciendo el Cambio Social en permanente lucha con las fuerzas conservadoras que lucharán por la Restauración ante cualquier intento siquiera de que este Cambio se produzca, la condición será que la izquierda debe  fundirse con su pueblo, porque el pueblo siempre defenderá el Cambio Social, siempre dará su sangre por el Cambio revolucionario, sólo las clases interesadas lo harán, sólo las clases sociales que no tienen más que sus cadenas que perder en esta sociedad.
La condición de la vanguardia será el de fundirse con su pueblo porque sólo en el seno del pueblo el militante de la revolución social se mueve como pez en el agua (MAO). “…en los grandes procesos históricos, veinte años son igual a un día, si bien luego pueden venir días en que se condensen veinte años. La táctica del proletariado (Pueblo) debe tener en cuenta, en cada momento, ésta dialéctica objetivamente inevitable de la historia humana; de una parte, utilizando las épocas de estancamiento político o de la llamada evolución pacífica, para desarrollar la conciencia, la fuerza, y la capacidad combativa de la clase avanzada (Pueblo), encauzando toda esta labor de utilización hacia la meta final (Cambio Social), capacitándola para resolver prácticamente las grandes tareas al llegar los grandes días en que se condensen veinte años” (Marx).
Por todo lo expuesto entonces, podemos concluir,  que si bien la izquierda junto con su pueblo viene defendiendo el Proceso de Cambio desde hace muchos años atrás, puesto que el propio concepto “Proceso de Cambio” ya fue acuñado en el pasado más inmediato por pensadores de la talla de Ernesto Guevara y Marcelo Quiroga Santa Cruz sólo por nombrar los más notables, y en el entendido de que éste Proceso de Cambio no es propiedad de ningún líder circunstancial ni de ningún partido político, porque es propiedad del pueblo mártir que lo defendió con su sangre, la izquierda entonces tiene la obligación de seguir transitando por el camino revolucionario, es decir por el Cambio Social en la coyuntura actual siempre dentro de la conciencia de lo posible (Ernesto Sabato), en íntima unión con el Pueblo, más allá del Referéndum del Próximo 21 de Febrero, más allá de los errores circunstanciales que  comete el Gobierno en su gestión administrativa, más allá de la infiltración derechista que se permitió a nombre de la mal llamada inclusión, más allá de la corrupción que cometen algunos líderes de Organizaciones sociales o funcionarios públicos que de ninguna es cometida por todo el pueblo. La Izquierda junto con  el pueblo defenderá su Proceso porque sabe que la rueda de la historia no vuelve atrás, sabe que la revolución Socialista a  través del Proceso de Cambio llegará irremediablemente.

*El autor fue dirigente nacional de la Junta Nacional de Padres de Familia, vive en Tarija


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