Ir al contenido principal

El fascismo está actuando en Santa Cruz, el gobierno debe investigar

Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás...

El mito de la “revolución de las Pititas”

 

Por:  Ángel Cahuapaza Mamani

 

La “revolución de las Pititas” es el nombre general con el que se quiere hacer una historia inmediata del acontecimiento vivido entre octubre y noviembre de 2019. Después de seis meses de los hechos acaecidos, ya se escribieron varias publicaciones al respecto, queriendo narrar una “historia oficial” de los hechos desde la lógica de la clase media conservadora, racista y clasista (Pititas).

 

En todas las publicaciones que se realizaron, entre libros y artículos de opinión, se tiene una narración común de los acontecimientos y se maneja el discurso de que los hechos suscitados fueron por la lucha de “recuperación de la democracia” contra una “dictadura”, por una “revolución”, en contra de la “corrupción”, por la conquista de la “libertad de expresión”, en contra de un “fraude electoral”, y que la participación policial fue para unirse a esa “revolución” llevad adelante por los sectores urbanos representados por una clase media-alta que había quedado relegada del poder político por más de 13 años.

 

Dentro de este discurso oficial de historia inmediata narrado desde los Pititas, se quiere hacer creer que hubo una “revolución” y que las movilizaciones (bloqueos, marchas y cabildos en las principales ciudades capitales), encabezadas por sectores urbanos representados por una clase media-alta fueron una “revolución” de 21 días. No obstante, las revoluciones que se suscitaron en la historia produjeron varios cambios para toda una población o nación.

 

En ese sentido, entendemos por revolución a un cambio o transformación trascendental en el ámbito social, económico, cultural y religioso para toda una nación. Dentro de esta definición y revisando la historia, podríamos poner de ejemplo las grandes revoluciones que se produjeron en la historia, tal es el caso de la Revolución Francesa, la Revolución Industrial, la Revolución Soviética, la Revolución Mexicana para el contexto latinoamericano, o la Revolución de 1952 para el contexto boliviano.

 

Por lo tanto, los acontecimientos de octubre y noviembre de 2019 no tuvieron nada de revolución, porque no beneficiaron a toda la población boliviana, solo fue un movimiento de una parte de la población, teniendo en cuenta que la población mayoritaria en Bolivia sigue siendo indígena y que el sector movilizado fue encabezado por el sector urbano que representó a la clase media y alta en general, que culminó con el cambio de un gobierno transitorio.

 

Entonces no podemos hablar de revolución ante un movimiento de élites que pregonaba el discurso de defensa de la democracia, lucha por la libertad de expresión, contra una dictadura, corrupción, tiranía, nepotismo; y que en el fondo tuvo un plan estratégico de asalto al poder político por parte de los sectores conservadores, racistas y clasistas que ostentaban hambre de poder, porque este les había sido arrebatado por un indígena hace más de 13 años.

 

De la misma forma, no hubo cambios económicos para la población boliviana, más al contrario el gobierno transitorio está quebrando la economía boliviana con los casos de ENTEL, YPFB, BOA y el caso de los respiradores. Tampoco hubo un cambio social, sino un cambio de poder político, lo que si quería imponerse es la religión católica, no respetando el estado laico que rige en la constitución política boliviana.

 

Por ende, no fue revolución lo que pasó en octubre y noviembre de 2019 en Bolivia, más al contrario, fue un asalto al poder político por parte del sector conservador, racista y clasista, que utilizó al movimiento de los Pititas con el apoyo de grupos paramilitares, la parcialización de la Policía y participación de las Fuerzas Armadas. En consecuencia, los Pititas están representados por un gobierno transitorio, que en su accionar está haciendo todo lo que criticaban en su momento al gobierno anterior y que está lleno de corrupción en poco tiempo. Desmitificando uno de los mitos, podría afirmarse que no hubo revolución, más bien hubo un asalto al poder político para batir un récord de corrupción.

 

Historiador


Síguenos en Facebook:  La Escuela Socialista Comunitaria 
en Twitter: @escuelanfp y en Telegram
Para recibir nuestro boletín semanal llena el siguiente formulario:


En Bolivia:












Comentarios

Entradas populares de este blog

Pedro Ignacio Muiba, el héroe

Por: Homero Carvalho Oliva En 1975, mi padre, Antonio Carvalho Urey, terminó una investigación iniciada en la década de los sesenta que habría de cambiar la historia nacional. Después de muchas visitas al Archivo Nacional de Bolivia, dirigido en ese entonces por Gunnar Mendoza, extraordinario intelectual e historiador, quien le ayudó a ubicar los folios que habrían de probar toda una hazaña que da testimonio que los indígenas moxeños participaron activamente en la Guerra de la Independencia de nuestro país, al mando del cacique Pedro Ignacio Muiba. Esta investigación se publicó, primero en septiembre de 1975, en un policopiado financiado por la Universidad Técnica del Beni, en un pequeño tiraje de 200 ejemplares y luego en la famosa Biblioteca del Sesquicentenario de Bolivia. Dos años más tarde, en 1977, Antonio publicó el libro titulándolo Pedro Ignacio Muiba, el Héroe y de esa manera se reparó una injusticia histórica. En sus investigaciones, Antonio se basó, entre otros, en...

La despatriarcalización

Por: Julieta Paredes Al igual que el Seguro Universal de Salud (SUS), la despatriarcalización, como nombre para una política pública, tardó mucho, pero llegó. Entonces, en este marzo de luchas de las obreras, es necesario analizar, ¿qué es lo que realmente llegó? Fruto de una serie de movilizaciones de mujeres pertenecientes a las organizaciones sociales del proceso de cambio, se lograron algunas medidas en el Ejecutivo. Fueron movilizaciones que se realizaron a lo largo del año pasado, con encuentros departamentales. Así fue que se logró concretar un listado de demandas que más o menos se repitieron a lo largo de estos años, con algunas interesantes novedades. Entre ellas podemos señalar la exigencia del salario al trabajo doméstico y la necesidad de un espacio en el Gobierno para este sector. Algo así como un Ministerio de las Mujeres, instancia que tenga la jerarquía necesaria para efectuar las tareas que corresponden a la mitad de la población de Bolivia que somos las mu...

Idiosincrasia e ideología

Por: Félix Tarqui Triguero No son posibles las revoluciones económicas sin las revoluciones culturales porque todos aquellos contenidos que constituyen el fundamento de determinada cosmovisión propia de cada nacionalidad o sociedad pueden ayudar o frenar su avance por ser una manera de pensar de cada agrupación humana, en funcion a su historia y cultura. Así nace la idiosincrasia propia de cada pueblo, sin embargo, se enfrenta a la idiosincrasia forzada o alienante que influye día a día a las grandes masas de la población mundial de manera globalizante, en ese contexto necesitamos ver que Bolivia es un país de molde capitalista y sub desarrollado (empobrecido por la clase dominante que gobernó desde 1825 exceptuando a Antonio José de Sucre, Andrés de Santa C. hasta el 2005), La ideología como el estudio de las ideas es también un proceso de construcción critica, influenciado tan pronto el individuo se encuentra inmerso en las realidades sociales, económicas, culturales...