Ir al contenido principal

El fascismo está actuando en Santa Cruz, el gobierno debe investigar

Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás

Luis Espinal; la iglesia católica optó por los ricos


Por: Joaquín Ayma

   
“Los jerarcas de la Iglesia, deben compartir sus bienes con los pobres y si no lo hacen de a buenas, quiera Dios que el pueblo se los quite” 

Espinal Camps

Llegó a Bolivia, el 6 de agosto de 1968. América Latina, era un hervidero en el que simultáneamente, se vivían desolaciones pero también grandes esperanzas. EEUU promueve y financia Golpes de Estado. Los dueños del poder, vacían las magras arcas de los países colonias, y depredan sus recursos naturales.

En junio de 1967 se produce la tristemente célebre “Masacre de San Juan” y en octubre del mismo año el Ejército Boliviano, asesorado por militares norteamericanos, derrotan al Ejército de Liberación Nacional (ELN), guerrilla dirigida por el Comandante Ernesto Che Guevara. En 1968, año en que Luís llega al país, el ELN, organiza el retorno a la lucha armada y el movimiento popular se reúne en torno, a la Central Obrera Boliviana (COB). René Barrientos, a quien René Zabaleta denominaba “el déspota idiota”, se campea victorioso.

La profunda sensibilidad de Luís, le permite percibir con facilidad las hondas contradicciones económicas y sociales de su nueva patria. Desde su llegada, quiere abarcarlo todo; Simultáneamente es productor de televisión, radialista, cineasta, cronista de periódicos, catedrático, escritor de libros de cine, activista de los Derechos Humanos y militante de la iglesia de los pobres.

El 21 de agosto de 1971, el Coronel Hugo Banzer, apoyado por la dictadura de Brasil y EE UU, pone fin al breve periodo de libertades, inaugurado por Juan José Torres. Una de sus primeras medidas fue, restituir la pena de muerte. El 31 de diciembre de aquel año, como un saludo de navidad, Luís escribe: “Ante todo, deseamos para Bolivia, un 1972 sin presos, sin torturados, sin fusilados, sin campos de concentración, con universidades funcionando normalmente, un año sin masacres de San Juan, ni de ningún otro santo (...).en fin, un año, de vacaciones para la policía y para la represión”.

La primera semana del mes de febrero de 1973, la jerarquía eclesiástica designa nuevos obispos, entre los que hay varios ancianos. Espinal, comenta en su programa: “el senado más viejo del mundo, decrépito y biológicamente más inclinado a conservar y frenar que a abrir nuevos caminos”. Aquella declaración provoca la protesta del embajador del Vaticano en Bolivia, lo que determina su expulsión de Radio Fides.

En sus editoriales denunciaba, el hartazgo y la opulencia de la Iglesia: “pasaron los años y la cruz se volvió de oro y de marfil… y se empezó a olvidar las enseñanzas del que fuera clavado en ella y se volvió a escupir al pobre” expresaba.

Junto a las mujeres mineras, participó en la huelga de hambre que restituyó la democracia al país. Luego de 22 días de huelga, Luís sostiene: “No he hecho nada extraordinario, era algo que simplemente había que hacer. No solamente se ha conseguido lo que se pedía, sino que se ha conquistado esperanza y osadía al pueblo”.

En 1979, un grupo de periodistas crea el “Semanario Aquí”, iniciando uno de los proyectos, más ambiciosos del periodismo nacional; recuperar credibilidad y constituirse en el vocero del movimiento popular. El equipo de redacción está compuesto por René Bascopé, David Acevey, Coco Manto, Edgardo Vázquez, Gastón Lobatón, Antonio Peredo y José Alcócer.

En el primer número del “Semanario”, Luís escribe: “Nosotros no somos un medio de comunicación independiente, nosotros tomamos partido a favor del pueblo…”.

En su tarea de crítico de cine, el viernes 21 de marzo de 1980 Espinal asiste a ver una película, en la que un grupo de forajidos, realizan todas las infamias posibles, y el brazo desmemoriado y negligente de la ley, jamás da con ellos. Cerca de la media noche, a la salida del cine, lo secuestra un comando de paramilitares. Durante cinco horas lo torturan, queman su cuerpo con cigarrillos y electricidad, le rompen varios huesos y le disparan 17 veces.

Los carniceros, quieren arrancar de entre la sangre de Luís, la ternura y la esperanza de este hombre, lleno de amor irreductible.

“El pueblo no tiene vocación de mártir. Cuando el pueblo cae en combate, lo hace sencillamente, sin poses, sin gestos melodramáticos”, solía decir. Consecuente con esta actitud, nunca declaraba ser sacerdote o religioso, colocaba simplemente, periodista.

“Una religión que no tenga la valentía de hablar en favor del hombre, tampoco tiene el derecho a hablar en favor de Dios” explicaba.

Síguenos en Facebook:  Escuela Nacional de Formacion Politica 
Twitter: @escuelanfp

Rellene el siguiente formulario para suscribirse.


En Bolivia:










Regístrate también en nuestro canal en Telegram

Comentarios

Entradas populares de este blog

La despatriarcalización

Por: Julieta Paredes Al igual que el Seguro Universal de Salud (SUS), la despatriarcalización, como nombre para una política pública, tardó mucho, pero llegó. Entonces, en este marzo de luchas de las obreras, es necesario analizar, ¿qué es lo que realmente llegó? Fruto de una serie de movilizaciones de mujeres pertenecientes a las organizaciones sociales del proceso de cambio, se lograron algunas medidas en el Ejecutivo. Fueron movilizaciones que se realizaron a lo largo del año pasado, con encuentros departamentales. Así fue que se logró concretar un listado de demandas que más o menos se repitieron a lo largo de estos años, con algunas interesantes novedades. Entre ellas podemos señalar la exigencia del salario al trabajo doméstico y la necesidad de un espacio en el Gobierno para este sector. Algo así como un Ministerio de las Mujeres, instancia que tenga la jerarquía necesaria para efectuar las tareas que corresponden a la mitad de la población de Bolivia que somos las mu

Idiosincrasia e ideología

Por: Félix Tarqui Triguero No son posibles las revoluciones económicas sin las revoluciones culturales porque todos aquellos contenidos que constituyen el fundamento de determinada cosmovisión propia de cada nacionalidad o sociedad pueden ayudar o frenar su avance por ser una manera de pensar de cada agrupación humana, en funcion a su historia y cultura. Así nace la idiosincrasia propia de cada pueblo, sin embargo, se enfrenta a la idiosincrasia forzada o alienante que influye día a día a las grandes masas de la población mundial de manera globalizante, en ese contexto necesitamos ver que Bolivia es un país de molde capitalista y sub desarrollado (empobrecido por la clase dominante que gobernó desde 1825 exceptuando a Antonio José de Sucre, Andrés de Santa C. hasta el 2005), La ideología como el estudio de las ideas es también un proceso de construcción critica, influenciado tan pronto el individuo se encuentra inmerso en las realidades sociales, económicas, culturales

Pedro Ignacio Muiba, el héroe

Por: Homero Carvalho Oliva En 1975, mi padre, Antonio Carvalho Urey, terminó una investigación iniciada en la década de los sesenta que habría de cambiar la historia nacional. Después de muchas visitas al Archivo Nacional de Bolivia, dirigido en ese entonces por Gunnar Mendoza, extraordinario intelectual e historiador, quien le ayudó a ubicar los folios que habrían de probar toda una hazaña que da testimonio que los indígenas moxeños participaron activamente en la Guerra de la Independencia de nuestro país, al mando del cacique Pedro Ignacio Muiba. Esta investigación se publicó, primero en septiembre de 1975, en un policopiado financiado por la Universidad Técnica del Beni, en un pequeño tiraje de 200 ejemplares y luego en la famosa Biblioteca del Sesquicentenario de Bolivia. Dos años más tarde, en 1977, Antonio publicó el libro titulándolo Pedro Ignacio Muiba, el Héroe y de esa manera se reparó una injusticia histórica. En sus investigaciones, Antonio se basó, entre otros, en