Ir al contenido principal

El fascismo está actuando en Santa Cruz, el gobierno debe investigar

Las casetas del populoso mercado Mutualista en Santa Cruz comenzaron a quemarse la noche de ayer domingo, justamente al día siguiente de que los gremialistas anunciaron que no acatarán el anunciado paro de 48 horas decidido por la Gobernación y el Comité Cívico cruceños, a la cabeza de otras instituciones totalmente controladas por la derecha, como la Universidad Gabriel René Moreno. Aunque se desconocen las causas que originaron este desastre, llamó enormemente la atención que los pocos hidrantes de la zona no tenían agua, por lo que el fuego que inició en algunos puestos pudo extenderse rápidamente. Vanos fueron los esfuerzos de los comerciantes, que trataron de recuperar la mercadería que tenían en sus kioscos, arriesgando sus vidas. Con la llegada de los bomberos y colaboración de los mismos comerciantes se combatió el siniestro; luego, cuando arribó al lugar Luis Fernando Camacho, fue recibido con mucha hostilidad porque varios comerciantes abiertamente lo acusaron de estar detrás...

Mariátegui y Guevara, el sacrilegio de hacer la historia



Por: Javier Larraín

Lenin, con peluca y sin bigotes  
En Las pantuflas de Stalin y otras historias el escritor José Miguel Varas reproduce la entrevista a Margarita Vasílievna Fofánova, dueña del departamento del barrio obrero de Víborg, al que arribó, procedente de Finlandia, Konstantín Petrovich Ivanov (Lenin), el viernes 22 de septiembre (5 de octubre) de 1917.
Margarita Vasílievna cuenta cada día de “encierro” de Lenin en un pequeño cuarto, el que solo abandonaba para comer y caminar en la sala del departamento, con peluca y sin bigotes.
Allí llegó Lenin tras dirigir la carta [El marxismo y la insurrección] del 15 (28) de septiembre al Comité Central del partido bolchevique –que ignoró por días su presencia clandestina en Petrogrado–, donde planteó el deber y urgencia de “tomar el poder”. Propuesta que fue desechada. “No es el momento”, dijeron varios.
El mes de octubre Lenin lo dedicó a “convencer” a los dirigentes bolcheviques de la pertinencia de llevar a cabo de una vez la insurrección. En reunión del 16 de octubre (29) obtuvo los votos necesarios. Nueve días después nacía la Revolución.
Hasta la victoria de los bolcheviques, con la excepción de la fugaz experiencia de la Comuna de París, el socialismo y el comunismo eran cuestiones puramente teóricas. Contrariando a sus antecesores, Lenin develó, primero, los desaciertos de los populistas rusos, y segundo, las claudicaciones de Plejanov y Kautski. Al tiempo que consagró gran parte de 1917 a persuadir a sus propios camaradas de que el triunfo de una revolución socialista era posible. En efecto, golpeteó a los vacilantes y dio paso al experimento social más trascendental de la humanidad. Al evaluar estos hechos, un veinteañero Gramsci sentenció en Avanti: “Es la revolución contra El Capital de Carlos Marx”.   
José Carlos y Ernesto: la sabiduría de desaprender
Los dos marxistas más profundos e influyentes de nuestra América, José Carlos Mariátegui y Ernesto Che Guevara, nacieron el mismo día: 14 de junio. El peruano, en el poblado de Moquegua en 1894; el argentino, en la ciudad de Rosario en 1928.
Ambos pertenecieron a familias de una pequeña burguesía intelectual, con el tiempo relativamente empobrecidas; ambos padecieron en su infancia accidentes y enfermedades crónicas, que les acompañaron toda la vida; ambos tuvieron que trabajar siendo adolescentes, para contribuir con los gastos de sus hogares; ambos abrazaron el oficio del periodismo y la escritura, y tempranamente se dejaron seducir por Carlos Marx; ambos brillaron en su época y murieron sin cumplir siquiera 40 años.  
Aunque no llegaron a conocerse en persona, el joven Guevara sí tuvo el privilegio de dialogar, de la mano del doctor Hugo Pesce, con la obra cumbre del Amauta, 7 ensayos de interpretación de la realidad peruana. Desde ese instante, los puentes entre ambos quedaron tendidos para siempre.
En la Sierra Maestra, ya con el grado de comandante, Guevara escribió en 1957 al Coordinador Nacional del Movimiento 26 de Julio: “Pertenezco por mi formación ideológica a los que creen que la solución de los problemas del mundo está detrás de la llamada Cortina de Hierro”. La respuesta de su compañero, René Ramos Latour, se centró en enaltecer las cualidades humanas de José Martí. A pocos meses de su muerte, en el Diario de Bolivia, un maduro Guevara reflexionó: “26 de julio… revolución contra las oligarquías y los dogmas revolucionarios”.     
¡Ahora es cuando!
En El marxismo en América Latina el filósofo Michael Löwy acierta en reconocer tres virtudes de José Carlos y Ernesto: 1) La honestidad intelectual y valentía para desprenderse y desafiar los dogmas imperantes en la izquierda –en esa época de notable corte estalinista–, la práctica decidida de la herejía; 2) Su inclinación por proveer al marxismo de un ropaje humanista, lejano de cualquier mecanicismo; 3) La fe en el ser humano y en la posibilidad cierta de la construcción del socialismo.
Al igual que Lenin, Mariátegui y Guevara ofrecieron la totalidad de sus capacidades humanas, intelectuales y políticas a la causa de los humildes. Estudiaron, militaron y fundaron. No dudaron de la justeza de sus ideas y desatendieron a los oportunistas del “no es el momento”. Concluyeron que las revoluciones sociales no son hijas de la razón, sino que son precisamente obras de mujeres y hombres dispuestos a correr los límites establecidos, de revolver la Historia hasta hacerla estremecer, porque, al fin y al cabo, ¿quiénes hacen la Historia?
Profesor de Historia y Geografía 

Síguenos en Facebook:  Escuela Nacional de Formación Política 
Twitter: @escuelanfp

Rellene el siguiente formulario para suscribirse.


En Bolivia:










Regístrate también en nuestro canal en Telegram

Comentarios

Entradas populares de este blog

Pedro Ignacio Muiba, el héroe

Por: Homero Carvalho Oliva En 1975, mi padre, Antonio Carvalho Urey, terminó una investigación iniciada en la década de los sesenta que habría de cambiar la historia nacional. Después de muchas visitas al Archivo Nacional de Bolivia, dirigido en ese entonces por Gunnar Mendoza, extraordinario intelectual e historiador, quien le ayudó a ubicar los folios que habrían de probar toda una hazaña que da testimonio que los indígenas moxeños participaron activamente en la Guerra de la Independencia de nuestro país, al mando del cacique Pedro Ignacio Muiba. Esta investigación se publicó, primero en septiembre de 1975, en un policopiado financiado por la Universidad Técnica del Beni, en un pequeño tiraje de 200 ejemplares y luego en la famosa Biblioteca del Sesquicentenario de Bolivia. Dos años más tarde, en 1977, Antonio publicó el libro titulándolo Pedro Ignacio Muiba, el Héroe y de esa manera se reparó una injusticia histórica. En sus investigaciones, Antonio se basó, entre otros, en...

La despatriarcalización

Por: Julieta Paredes Al igual que el Seguro Universal de Salud (SUS), la despatriarcalización, como nombre para una política pública, tardó mucho, pero llegó. Entonces, en este marzo de luchas de las obreras, es necesario analizar, ¿qué es lo que realmente llegó? Fruto de una serie de movilizaciones de mujeres pertenecientes a las organizaciones sociales del proceso de cambio, se lograron algunas medidas en el Ejecutivo. Fueron movilizaciones que se realizaron a lo largo del año pasado, con encuentros departamentales. Así fue que se logró concretar un listado de demandas que más o menos se repitieron a lo largo de estos años, con algunas interesantes novedades. Entre ellas podemos señalar la exigencia del salario al trabajo doméstico y la necesidad de un espacio en el Gobierno para este sector. Algo así como un Ministerio de las Mujeres, instancia que tenga la jerarquía necesaria para efectuar las tareas que corresponden a la mitad de la población de Bolivia que somos las mu...

Idiosincrasia e ideología

Por: Félix Tarqui Triguero No son posibles las revoluciones económicas sin las revoluciones culturales porque todos aquellos contenidos que constituyen el fundamento de determinada cosmovisión propia de cada nacionalidad o sociedad pueden ayudar o frenar su avance por ser una manera de pensar de cada agrupación humana, en funcion a su historia y cultura. Así nace la idiosincrasia propia de cada pueblo, sin embargo, se enfrenta a la idiosincrasia forzada o alienante que influye día a día a las grandes masas de la población mundial de manera globalizante, en ese contexto necesitamos ver que Bolivia es un país de molde capitalista y sub desarrollado (empobrecido por la clase dominante que gobernó desde 1825 exceptuando a Antonio José de Sucre, Andrés de Santa C. hasta el 2005), La ideología como el estudio de las ideas es también un proceso de construcción critica, influenciado tan pronto el individuo se encuentra inmerso en las realidades sociales, económicas, culturales...